Sueños en guerra

Una lágrima intentando nutrir una tierra que murió hace muchos años. Un llanto silencioso, de quien, indefenso, se pregunta por qué debe sobrevivir a tan temprana edad.

Una mirada que se pierde entre los escombros, cargada de una inocencia que jamás debió perderse y un sueño, que en el fragor de la batalla, nunca desaparece.

Demonios de color dorado, que a toda velocidad, arrebatan violentamente las vidas de quienes no deben morir por luchas en nombre de nadie. Sentir que la muerte te acecha y a cada paso que das, puedes estar cerca del trágico final.

Mientras millones de ojos te observan, sus corazones no se movilizan y cientos de almas en plena niñez, viajan sin rumbo hasta un destino soñado, pero cada vez menos real.

Y llegará el día en el que todo acabe, aunque por desgracia, otro día, todo volverá a comenzar